El peligroso oficio de informar en América Latina

La persecución de periodistas que informan sobre la crisis que atraviesa Nicaragua preocupa. La organización Amnistía Internacional alertó sobre cómo el régimen de Daniel Ortega intimida, encarcela o lleva al exilio a los reporteros que se muestran críticos con el poder, criminalizando su labor.

 

Entre los casos más resonantes denunciados por Amnistía Internacional figuran el de los periodistas nicaragüenses Miguel Mora, director del canal 100% Noticias que fue cerrado, y la directora de prensa Lucía Pineda, detenidos desde diciembre pasado bajo cargos de «terrorismo» por informar sobre las protestas.

“En un primer lugar vimos que en el contexto de las protestas, los periodistas que las cubren son atacados y su integridad física es obviamente puesta en riesgo. En los casos más extremos, el mundo fue testigo del asesinato de Ángel Gaona, el 29 de abril de 2018, mientras cubría en vivo una protesta en Bluefields. Luego tenemos las detenciones arbitrarias, destacan muchísimo los casos de Lucía Pineda y Miguel Mora, que desde diciembre de 2018 están detenidos y acusados de promover el terrorismo”, explica Carolina Jiménez, directora adjunta de Amnistía Internacional para las Américas.

La situación sobre el peligroso oficio de hacer periodismo en América Latina también preocupa en Europa, donde tiene la sede La Federación Internacional de Periodistas, importante confederación de sindicatos y asociaciones de reporteros.

Philippe Leruth, presidente de la federación, comenta que “México y Colombia tienen el triste privilegio de ser los países más peligrosos del mundo para los periodistas. Cada año, se asesinan en México periodistas de manera casi anónima porque se trata de reporteros locales que con su trabajo en provincia incomodan al mundo del crimen. Entonces los matan y sólo se sabe en sus pueblos, el gran público no se entera. En Colombia pienso que no todos los periodistas asesinados están en el marco de la guerra entre las diferentes facciones, pero también los hay que sí han sido asesinados en medio de esa guerra”.

En cuanto al caso de México, que en enero ha estrenado un nuevo gobierno con Andrés Manuel López Obrador como presidente, Carolina Jiménez se muestra prudente sobre un posible cambio: “Lamentablemente en el 2019, siguen habiendo periodistas asesinados. Ha sido cuestionado el presidente en diferentes ocasiones sobre este tema. El presidente se ha comprometido públicamente a mejorar el mecanismo de protección de periodistas que ahora existe, esperamos que esto se traduzca en mejores recursos y en un plan mucho más efectivo, y que la nueva fiscalía general pueda mejorar las investigaciones sobre asesinatos de periodistas. Pero no hemos visto por ahora una mejora significativa en la situación de los periodistas en México”.

El viernes, un periodista mexicano que tenía un programa de radio en una comunidad indígena de Oaxaca (sur) fue asesinado a balazos, con lo que suman cuatro comunicadores ultimados en México en 2019.

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